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Septiembre 2005

    ¿Cuáles pueden ser las consecuencias de un virus?

    Las consecuencias de los virus pueden ser casi incalculables. Por ejemplo, y para que se den cuenta, sólo hay que conocer el caso que ocurrió hace escasamente un mes en Japón. Según la prensa japonesa, aproximadamente 40 MB de datos confidenciales relacionados con las inspecciones realizadas durante años a una planta nuclear fueron robados por un virus que infectó al ordenador de un empleado de la planta energética de la Mitsubishi Electric. Además, y según información facilitada por Sophos, los datos fueron distribuidos por un sistema de archivos llamado Winny.

    Según los funcionarios de la empresa, la fuga ocurrió cuando un ingeniero utilizó su ordenador personal para realizar trabajos de la compañía. El PC estaba infectado por ordenador anónimo que aparentemente ha permitido a los usuarios de Winny (el sistema más popular del país del sol naciente para compartir archivos, con cerca de 250.000 usuarios) tener acceso a esos datos.

    Los documentos que quedaron visibles incluían fotografías del interior de la planta nuclear, y los nombres y las direcciones de los ingenieros.

    Los ataques de virus también han llegado a Gran Bretaña. De esta forma, y según un estudio del Centro de Coordinación para la Seguridad de la Infraestructura Nacional de Gran Bretaña, cerca de 300 departamentos del gobierno británico y empresas clave del país han sido objeto de ataques de troyanos, la mayoría proveniente de Asia.

    Así, los virus llegan a estas organizaciones a través de mensajes de correo electrónico, de documentos adjuntos o de enlaces a páginas Web y permiten a los hackers robar información privilegiada y lanzar ataques potenciales desde un lugar diferente.

    Así, y a principios de este año, un intento de piratear información de la oficina del banco Sumitomo Mitsui de Londres fue atribuida a un troyano que registraba las pulsaciones del teclado, y el mes pasado una pareja fue arrestada en la capital de Gran Bretaña por su colaboración en un escándalo de espionaje industrial dirigidas a empresas israelíes.

    Para finalizar, también hay que señalar que en numerosas ocasiones los virus se enmascaran tras mensajes atractivos para que estos sean abiertos por los internautas. Los últimos consistían en anunciar la captura de Osama Bin laden, o incluso teorías extravagantes sobre una conspiración en la muerte del fallecido Papa Juan Pablo II.

    El gusano puede enviar una amplia gama de mensajes, incluyendo el siguiente: “alguien me ha enviado este documento robado de un organismo secreto del Gobierno y que trata sobre la muerte de Juan Pablo II. En él se dice que ha sido asesinado por dos “médicos” contratados por algún gobierno.

    l texto adjunto contiene toda la historia oculta sobre su muerte y la identidad de estos dos médicos”.

    En otros mensajes, el gusano informa de la presunta muerte de Michael Jackson, la captura de Osama Bin Laden por soldados americanos o que el autor del gusano MyDoom ha sido arrestado por Microsoft.